Lo mejor las novilladas.

Por el momento, este San Isidro esta siendo muy deslucido. Los toros no están siendo muy lucidos por lo que una corridas sin toro, corridas de silencios. La gran sorpresa de la feria ha sido el riojano Diego Urdiales que entrando de rebote en una sustitución puso la plaza boca abajo, yo me quito el sombrero después de estar dos años sin torear y la que lió está al alcanze de pocos espero que tenga muchas oportunidades porque este torero le queda mucho por decir en la plaza .

Morenito ya fue destacado en la feria de la comunidad y se reafirmo el día 21 de mayo. Increibles verónicas en ambos ejemplares, dejó buen sabor de boca en la afición venteña.

Otro gran destacado fue El Cid que formó el taco en sus dos toros pero falló con la espada. Estuvo impresionante por naturales. Su faena fue por cante grandes desde el primer muletazo desde los medios hasta el final, una pena la puta espada.

Valverde se la jugó con uno del Marqués de Domeqc y Ferrera cortó una oreja a uno de Pereda.

El viernes llegó la mejor corrida de la feria, el cartel más rematado pero cinco toros no sirvieron y Morante se inventó una faena de arte y valor. Le dieron un aviso, continuó toreando, pinchó y cortó una oreja.

Única puerta grande por el momento es de Andy Cartagena, las novilladas son lo más destacado ya que los jóvenes ponen mucha voluntad. El Payo estuvo sensacinal una pena que resultara cogido, Miguel Tendero, Ruben Pinar y El Sombrerero han pasado más que dignamente por la capital.

Dos cogidas muy graves, la primera fue al veterano Frascuelo que le destrozó los dos muslos y a el banderillero El Ruso al que le desgarró el ano, una auténtica pena, suerte y ánimo maestros.

Por último en la penosa corrida de Samuel Flores hubo dos despedidas por el precio de una, en un principio sólo iba a despedirse Pepín Liria pero luego se confirmó que iba a ser la última corrida del maestro Esplá. Dos grandes toreros que se van, siempre estarán en la memoria.

De lo demás nada detacable, el juego de los toros pésimos y los toreros no pudieron hacer nada. Pasan en blanco, una vez más Serafín Marín y El Capea, Talavante, Bautista.