martes, 15 de febrero de 2011

De vuelta a los origenes


Queríamos hacer algo diferente, que la afición volviera como nunca antes debió irse. La reducción de festejos por la crisis hizo mella en un pueblo del Valle del Tiétar, Sotillo de la Adrada. Allá por 2007, cuando vivíamos en la opulencia, teníamos como era costumbre una corrida de toros, una novillada y un festejo de rejones en las fiestas de septiembre. Pero año tras año fue disminuyendo hasta encontrarnos con una charlotada sin picadores y unos recortadores el pasado 2009.

¿Por qué no podían volver los festejos populares como la becerrada local tan implantada en nuestro pueblo durante muchos años? La idea era perfecta ya que los costes eran mínimos para el empresario y la satisfacción iba a ser mucho mayor que un espectaculo menor. Con la reunión de un grupo de jóvenes y con la inestimable ayuda de Mariano Jiménez salió adelante la idea.

El mes de agosto fue un hervidero de rumores de qué mozos se pondrían delante de los añojos, de si este o aquel iban de cabeza de cartel... Recuerdo que cada tarde me paraban más de cinco veces por si sabía algo nuevo.

Volvieron a verse capotes por las calles, parques y placetuelas. Todos los que participábamos, quedábamos para entrenar muchas tardes, nos imaginábamos “la faena” o “el par” de banderillas que había que poner al desconocido animal al que nunca nos habíamos enfrentado.

Y qué casualidad que comenzaron a salir jóvenes interesados hasta debajo de las piedras. Todos querían coger el capote y la muleta. Preguntaban cómo se daba una verónica y se quedaban asombrados con lo que pesaba el capote y con la destreza con lo que lo manejábamos. Querían conocer este mundo que parece tan inaccesible.

Que mejor año para volver a recuperar esta tradición que en 2010 cuando se cumplen 50 años de la inauguración del coso sotillano.

CONTINUARÁ...

domingo, 6 de febrero de 2011

Una tarde para el aficionado


Primera tarde de la temporada y primera alegría. Llegué a Valdemorillo con buenas vibraciones por el cartel y algo más de dos horas después salí con esas sensaciones confirmadas.

Sobre el papel era un cartel con tirón para el aficionado. Tres toreros del gusto de Madrid a las puertas de Madrid, y en el mes de febrero para salir lanzado hacia la temporada con el run run de los taurinos en el aire.

Pero ya se sabe que el toro es la base de la fiesta, por lo que sin una buena ganadería delante todo se viene abajo. Pero no fue el caso, porque los de Peñajara en líneas generales salieron muy buenos, con movilidad, encastados y lo que es mejor aún, con emoción. A excepción del segundo, que fue un mastodonte de Javier Gallego al que le faltaba un mes para cumplir 6 años que desarrollo sentido, y el 4º con el que estuvo firme Robleño.

Pero también en cuanto a presentación. Ya se sabe que en estos primeros meses todavía es complicado tener rematados los toros, todavía estamos en invierno y este toro es totalmente diferente al de junio.

Fernando Robleño supo estar a la altura del primero al que exigió y tuvo mucha movilidad. Estuvo firme y logró buenas tandas por el mejor pitón del toro, el derecho. Paseó una oreja. El cuarto fue el peor de la tarde, pero aún así quiso agradar. Robleño sale muy reforzado de la primera tarde de la temporada. Si sigue a este nivel puede volver al sitio donde estuvo allá por el año 2002.

Iván Fandiño confirmó su constante evolución. En el segundo, remiendo de Javier Gallego, le buscaba los tobillos al rematar cada muletazo. Estuvo muy serio y con mucho valor. El quinto quizá fue el mejor de la tarde y consiguió dar los muletazos más largos de la tarde. La faena fue a mucho más ya que al principio el burel carecía de transmisión. El público acabó entregado al torero. El presidente sacó el pañuelo azul para dar la vuelta al toro antes de sacar el blanco, la plaza protestó con razón una decisión incomprensible.

Cerró la terna Alberto Aguilar, que quiere ser torero. Y lo será porque tiene cualidades. Buen manejo del capote, intentó agradar en todo momento con largas cambiadas y quites por verónicas. El tercero fue a menos, pero dejó para el recuerdo la segunda tanda por el lado derecho sublime. El sexto le dio un revolcón sin consecuencias, lo intento todo para contentar a la afición. Se llevó el peor lote. Si mejora con los aceros será capitán general.

En definitiva, una tarde para el aficionado. Por culpa de la espada no vimos más orejas, pero qué más da, disfrutamos de tres que quieren ser toreros, que tienen ganas y cualidades. La temporada puede continuar.

domingo, 30 de enero de 2011

Recomendaciones literarias


Como en la música, la pintura, la escultura o la arquitectura, otro arte como la literatura ha ido de la mano de los toros desde sus comienzos. Quiero recordar unas palabras de Federico García Lorca, uno de los grandes exponentes de esta temática: “El toreo es probablemente la riqueza poética y vital de España, increíblemente desaprovechada por los escritores y artistas, debido principalmente a una falsa educación pedagógica que nos han dado y que hemos sido los hombres de mi generación los primeros en rechazar. Creo que los toros es la fiesta más culta que hay en el mundo”.

Anoche en Twitter surgió una interesantísima tertulia acerca de libros taurinos, un tema recurrente pero que levantó pasiones entre los participantes. Mario Juarez (@Juareztoros), Gerardo Ortega (@torosdegerardo), Pablo Hernanz (@Pablohernanz), Claudio de Diego (@TendidoSur), David Plaza (@DPH) y un servidor (@todosalostoros), expusimos nuestros libros favoritos y salió una lista que quiero recoger en este post para que todos podáis disfrutar de los libros que más nos han gustado.

El primero que nos puso a todos de acuerdo fue Juan Belmonte de Chaves Nogales, sin duda una de las mejores biografías que se ha escrito, por encima de la temática. Al hilo de Belmonte salió un libro de Joselito El Gallo escrito por Paco Aguado que no tiene nada que envidiar.

Hablando de Alfonso Navalón, surgió el libro Viaje a los toros del sol, que todos los que lo leyeron lo recomendaron sin dudarlo. Otro de los grandes. También apareció el nombre de El hilo del toreo de Pepe Alameda.

Después nos centramos en los libros de toros o de ganaderías. Los cuentos del viejo mayoral de Luis F. Salcedo que cuanta historia de los antiguos y Veinte toros de Martínez del mismo autor. Avatares históricos del toro de lidia de Domingo Delgado de la Cámara y dos libros editados en Espasa llamados Por las rutas del toro y Taurología, la ciencia del toro de lidia.

Algunos de estos libros son muy complicados de encontrar porque ya no se editan, por ello pregunté por librerías taurinas y me recomendaron Librería Egartorre y Librería Rodríguez.

Con esta lista ya hay lectura para rato, os animo a descubrir la historia de la Tauromaquia a través de estas joyas y como me recomendó Mario Juárez “Léelos con calma, disfrútalos y reflexiónalos”, “ninguno es la Biblia, lo bueno es leer y sacar conclusiones”. Palabra de maestro.

jueves, 27 de enero de 2011

Nuevas ilusiones

La temporada está a punto de comenzar. En Ajalvir se da oficialmente el pistoletazo de salida al año taurino y lo hará con un mano a mano singular, con los telefamosillos Víctor Janeiro y Canales Rivera, que apenas unas horas antes estará sentado en uno de esos programas con los que se lucra. Buena forma de preparar su primera tarde de la temporada. Y todavía habrá gente con ganas de pagar una entrada por verle.

Pero la primera cita importante es la del viernes 4 de febrero en Valdemorillo con un cartel de máximo interés para los aficionados. El mano a mano entre Juan Del Álamo y Víctor Barrio despierta el interés de todo el mundo taurino. Es una gran noticia que vuelva a ilusionar una hornada de novilleros que llamen con fuerza a la puerta del escalafón mayor.

Es necesario y urge una renovación, que aparezcan nombres nuevos que carguen de argumentos, ilusiones y éxitos las temporadas venideras. Ya tenemos la experiencia de la temporada pasada donde no salieron nuevos valores, a excepción de Alberto Aguilar y la resurrección de Juan Mora.

Además, a lo largo de la historia han sido muchos los enfrentamientos entre las figuras del momento, la rivalidad que había por hacerse con el cetro del toreo y consolidarse como la primera figura de la época. En la actualidad parece que cada uno vive cómodamente en su posición. Ya nos hemos olvidado del tercio de quites, de los manos a manos entre los mejores en las mejores plazas, nos hemos olvidado lo que se sentía al ver a las figuras con ganaderías diferentes.

Si queremos que la fiesta vuelva a tener el esplendor de antaño necesitamos que los de arriba tengan las ideas claras, que vuelva la competencia, aunque sea ficticia, que vuelva la pasión entre los aficionados por aquel o por el otro torero, en definitiva, volver a la esencia que no es otra que el amor por el toro y por el toreo.